Los departamentos de policía de Estados Unidos disponen de un “gran álbum de fotos” para identificar criminales. Está integrado por los millones de fotografías disponibles en redes sociales. Ahora bien, para la identificación, para encontrar la aguja en el enorme pajar, cuenta con la ayuda de la IA. Un servicio de la IA prestado a través de la empresa Clearview. Según Ton-That, CEO de la empresa que facilita este servicio de identificación a partir de la base de datos-imágenes, este “gran álbum” ha sido usado por la policía norteamericana en más de un millón de ocasiones desde 2017.
Primer suicidio inducido por inteligencia artificial: algo que temer
IA fotos
La empresa Clearview IA ha creado una base de datos de reconocimiento facial, a partir del escaneo de más de treinta millones de fotos publicadas en Facebook y otras redes sociales. Una base de datos de imágenes de gente que en ningún momento ha dado su consentimiento. Al parecer, no es legalmente necesario. Por supuesto, la gran mayoría de los treinta millones de fotografiados no han cometido ningún delito en su vida.
Ahora todos los que han puesto su cara en Facebook, participan sin saberlo en la rueda de reconocimiento que lleva a cabo la IA, tras un crimen. Sí, esas ruedas de reconocimiento que salen en las películas. Esas en que la víctima o un testigo ha de reconocer al criminal.
Información falsa y pérdida de empleo, principales amenazas de la IA
Hace casi treinta años, el sociólogo británico David Lyon escribió el libro El Ojo Electrónico. Teóricamente se apoyaba en la idea del panóptico, del clásico del utilitarismo Jeremy Bentham, y en la semilla puesta por el filósofo francés Michel Foucault en Vigilar y Castigar. Planteaba cómo la información de nosotros, especialmente como consumidores, era recopilada por grandes empresas. Con los datos del movimiento de nuestras tarjetas o nuestras cuentas bancarias, con las cámaras instaladas a lo largo de la ciudad, podían vigilarnos.
Cuando publicaba Lyon, era el momento en que Londres empezaba a llenarse de cámaras. En las esquinas de las calles, en las entradas de las tiendas, en el transporte público, parecía que, más que de la sociedad de las pantallas, había que hablar de la sociedad de las cámaras. Lo importante era el registro, que se guardaba. El término “Gran Hermano” recobró nueva fuerza.
Meta ofrecerá a las marcas IA para hacer anuncios a medida
Treinta años después, el potencial de la vigilancia parece haberse multiplicado por treinta mil. Con la IA en ebullición y el movimiento en internet como principal fuente, se trata de establecer vínculos entre la máquina registradora (internet) y la máquina analizadora (IA).
Antes, nuestros padres nos advertían de la necesidad de seleccionar y cuidar bien nuestras amistades. “¡Cuidado con quién vas!”, gritaban mientras salíamos de la casa. Ahora, además, habrá que advertir a nuestros hijos muy seriamente1: “¡Cuidado en qué redes sociales de internet te metes!”, “¡A ver qué dices y qué fotografías subes!”. Cualquier huella en internet, relacionada con otra huella, puede meterte en un lío. La IA nos sacará de muchos problemas y líos; pero, también, puede meterte en un lío. Bueno, la IA dirá que eres tú solito el que se ha metido en el lío.
También puedes seguirnos en nuestros canales de Telegram y Twitter
Link del artículo original
Si el presente artículo, video o foto intrigue cualquier derecho de autor por favor señálelo al correo del autor o en la caja de comentarios.
If this article, video or photo intrigues any copyright, please indicate it to the author’s email or in the comment box.