La compañía española TokenCrowd se define a sí misma como la primera promotora de tokenización inmobiliaria de activos de obra nueva. La empresa, que ofrece un modelo de financiación basado en blockchain, presentó recientemente su plataforma de tokenización para ofrecer acceso fraccionado a la inversión inmobiliaria.

CÓMO FUNCIONA LA TOKENIZACIÓN INMOBILIARIA CON BLOCKCHAIN

Tokenización inmobiliaria 

TokenCrowd tokeniza inmuebles propios y utiliza security tokens para ofrecer a los inversores acceso a propiedades de España y de otros mercados. Los security tokens son activos digitales emitidos con tecnología blockchain que representan la propiedad digital de ingresos físicos o derechos de dividendos. Los security tokens pueden comprarse, venderse e intercambiarse, cumpliendo con las leyes de valores locales. En el caso de TokenCrowd, la plataforma opera bajo la supervisión de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). Entre sus aliados tecnológicos cuenta con la plataforma de tokenización de activos del mundo real, Brickken.

Francisco Bourgon, cofundador y CEO de la plataforma, explica que la plataforma surge para responder a las carencias del sector. Entre ellas, el acceso cada vez más restringido al crédito, las grandes barreras de la banca para la financiación inmobiliaria o los elevados costes del crowdfunding. 

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Crowdfunding 3.0

TokenCrowd se refiere a su plataforma como el Crowdfunding 3.0 y afirma habr construido una plataforma flexible, sin la rigidez asociada a la banca y otros modelos de financiación.

¿Cómo funciona? Después de un análisis riguroso de viabilidad, TokenCrowd selecciona las mejores oportunidades de inversión para sus clientes. La compañía utiliza la figura de Security Token Offer (STO), a través de la cual divide la propiedad de un inmueble en un número determinado de tokens, que emite a través de blockchain. La STO funciona bajo la normativa y las regulaciones de España, representando la tokenización de préstamos participativos, que es la figura legalmente habilitada para tokenizar.

A través de la plataforma, los inversores pueden acceder a propiedades tokenizadas con una baja barrera de entrada, con 100 euros de inversión mínima. Los clientes deben superar procesos de verificación de identidad (KYC) y antilavado de dinero (AML), dos pasos habituales para garantizar el cumplimiento normativo. Una vez realizados estos pasos, eligen el tipo de proyecto más conveniente para invertir. En cuanto a los pagos, las inversiones pueden realizarse con euros o stablecoins. TokenCrowd ofrece a los clientes la opción de elegir entre una billetera custodiada o la autocustodia de sus fondos.

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Tokenización inmobiliaria

En cuanto a las plusvalías y los dividendos, una vez alcanzado el plazo de financiación para cada proyecto, las ganancias se distribuyen a todos los participantes. La rentabilidad de la inversión varía en función del tipo de inmueble. Dicha variación proviene del enfoque de la inversión del inmueble, ya que puede ser de compra, reforma y venta o compra, construcción y venta.

Así, cada inversión tiene un tipo de interés particular y adaptado. En general, TokenCrowd ofrece rendimientos anuales de entre el 10% y 15%, dependiendo del activo inmobiliario. La plataforma ofrece la opción de reinvertir las ganancias para beneficiarse del interés compuesto.

A diferencia de otras plataformas de tokenización inmobiliaria, TokenCrowd se presenta como la primera plataforma centrada en la tokenización de obra nueva. Es decir, inmuebles construidos desde cero, que se encuentran en proceso de construcción o que han sido terminados recientemente y nunca antes han sido habitados.

El modelo de TokenCrowd pretende ofrecer a los clientes la posibilidad de gestionar y diversificar su inversión de forma más eficiente, accediendo a una mayor liquidez al momento de retirar su inversión. Gracias al acceso y la facilidad de acudir a un mercado secundario, clave para facilitar de forma directa la negociación de los tokens digitales, junto a la facilidad de liquidar posiciones más pequeñas, habilitadas por la propiedad fraccionada.